Monumento al Tambor y Nazareno – Turismo Hellín
Hellín, encrucijada de caminos naturales y artificiales, que unen la meseta con la costa. Historia y parajes que dejaran huella a cada uno de los visitantes como una carta de colores,natural, cultural, patrimonial o gastronómica ¿Aún no tienes plan? Visita Hellín, “Un paisaje a la carta”
La Semana Santa de Hellín tiene sus orígenes en el año de 1411 durante la visita de San Vicente Ferrer que llegó con músicos y cantores para predicar en contra de las brujas y adivinos; es así como llegan al pueblo los tambores.
El tambor es elaborado -casi en su totalidad- de manera artesanal, en muchos de los casos se trata de hermosas joyas; sin duda, el tambor es el elemento central de la Semana Santa de Hellín.
La característica más representativa de la Semana Santa de Hellín es la tamborada, debido a que participan más de 30 000 personas con sus tambores que retumban por las calles del pueblo de manera ininterrumpida. El tamborilero estaba vestido de túnica negra y capuz negro a la cabeza, pero con el paso de los años, esto cambió y ahora el tamborilero está compuesto por una túnica negra y un pañuelo de color (principalmente rojo) anudado al cuello; además del escudo distintivo que portan las peñas, el clarín (o corneta), la bota de vino y en muchos casos un zurrón.
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